martes, 28 de septiembre de 2010

ACERCA DE ESTA MAESTRÍA por Alfonso Embriz


Creo que vale la pena compartir una reflexión sobre la Maestría en Diseño Gráfico que he tenido en la cabeza durante algún tiempo.

El mes pasado tuve la oportunidad de atender a un congreso en el Instituto de Tecnología de Massachusetts (MIT por sus siglas en inglés); una de las conferencias magistrales fue precisamente sobre educación y comunicación para las nuevas generaciones, los ponentes fueron Sherry Turkle y Henry Jenkins.

Por una parte Sherry Turkle explicaba cómo el contacto con los nuevos medios y las influencias asequibles gracias a la tecnología tiende a producir lo que ella llama "solitude" en ciertas comunidades o grupos de las distintas sociedades en el mundo. En contraste, Henry Jenkins alegaba que por el contrario las comunidades estaban tendiendo a organizarse por segmentos de interés en grupos de personas totalmente desconocidas (y además probablemente destinadas a no conocerse jamás). Si a alguno le interesa la conferencia está video documentada en la siguiente liga http://events.scratch.mit.edu/conference/index.php/Scratch/2010/announcement/view/9.

Lo que me me ha llevado a comentar esto es lo siguiente: todo esto que estos dos investigadores estadounidenses presentaron yo ya lo había escuchado antes. En los primeros semestres de la maestría, el Dr. Héctor Gómez Vargas describió este mismo fenómeno y recuerdo muy claramente cómo lo ejemplificó con el caso de los Otaku; por otra parte la doble Mtra. Carmen Castañeda Pineda también ya había expuesto este otro fenómeno social que en sus propias palabras las nombró tribus.

Quizá ahora ya sea evidente qué sentido tienen las reflexiones de las que escribí al principio; de entrada el nivel de capacidad y la calidad de las investigaciones en las que están involucrados los catedráticos con los que hemos tenido oportunidad de tomar clase. Otra situación destacable, la vigencia y relevancia de los temas que se revisan en el plan de estudios. Y otra cuestión muy loable, lo asequible que se hace la adquisición y el debate de estos temas, que trascendiendo las aulas de clase se pueden seguir en sobremesas, recesos de café, y demás espacios "informales" que a final de cuentas se han demostrado tan enriquecedores como cualquier otro foro académico.

Toda mi gratitud y respeto a la planta docente de la Maestría en Diseño Gráfico, que como bien me advirtió Carmen desde un principio: me cambió la vida.